¿Sigues indeciso acerca de pedir tus vacaciones en verano, el arranque de la primavera o la temporada invernal? Checa estos puntos a considerar si tu única opción es emprender un viaje cuando todos los demás también lo harán.

Foto por Alex Alvarez en Unsplash

Pros de viajar en temporada alta.

  • Solo abierto en temporada. Hay destinos que dependen fuertemente del turismo, y muchos de sus atractivos solo operan en época vacacional, ya sea por cuestiones económicas o porque su personal únicamente labora cuando hay más visitantes. Si viajas en temporada alta no tendrás que preocuparte por ello y encontrarás que la mayoría de tus puntos de interés estarán listos para que los disfrutes.
  • Hay descuentos en transportes y servicios. Una gran forma de incentivar que los estudiantes viajen es proporcionándoles descuentos en autobuses, hospedaje o acceso a museos, lo cual solo suele ocurrir en las semanas de mayor flujo turístico. Si es tu caso ¡aprovecha que todos esperan tu arribo y obtén mejores tarifas!
  • Más oportunidades de hacer amigos. A menos que vayas en plan de descanso y relajación total, a todos nos gusta convivir con gente nueva o incluso entablar una amistad inesperada, algo que se vuelve más probable y sencillo durante la temporada alta. Si viajas con pequeños, lo anterior cobra mayor importancia, pues solo durante las vacaciones escolares podrán convivir con otros niños.

Contras de viajar en temporada alta

  • Todo está más lleno. Si viajas en temporada alta, te será más difícil desplazarte por las calles de tu destino favorito o encontrar un punto en la playa que no haya sido ya tomado. Otro inconveniente es la poca disponibilidad de hospedaje: más vale reservar con tiempo pues hay lugares donde las habitaciones se ocupan en su totalidad. Lo mismo pasa con museos, restaurantes o sitios de diversiones.
  • Precios más elevados. Tal parece que muchos prestadores de servicios aprovechan la época más congestionada del año para obtener ganancias más pronto, lo cual puede afectar a tu bolsillo si no lo tienes en cuenta. Conviene que cheques con antelación los precios para evitar una sorpresa, o en su caso que consideres un extra en tu presupuesto vacacional.
  • Congestionamientos. Como todos quieren llegar a su destino durante esos días, muchas terminales de autobuses, aeropuertos y carreteras sufren atascos y retrasos; ten esto en cuenta si no tienes otra fecha para salir de viaje. Si quieres toparte con menos problemas, trata de agendar vuelos muy temprano o anticiparte a las horas pico de tu ciudad. Cinco minutos pueden hacer la diferencia.

Como puedes ver, viajar en temporada alta no necesariamente implica encontrarte con puras cosas negativas. Después de todo, lo que importa son las experiencias y momentos increíbles que surjan durante tus vacaciones.