En España, una de las atracciones más interesantes para realizar es el Camino de Santiago: una ruta que siguen quienes quieren visitar la tumba del apóstol Santiago. Lo puedes hacer como turista o como peregrino. Si planeas hacer esta caminata, hay una serie de recomendaciones que debes tener en cuenta para que la disfrutes al máximo.

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Asegura tu ruta

Como ya lo mencionábamos, hay distintos caminos que puedes seguir. Sin embargo, lo primero que debes hacer es asegurarte de elegir la ruta que más te convenga o la que más te guste. En la página oficial puedes ver todos los que hay y en qué consisten. Uno de los más famosos es el Camino Francés, que consiste en salir desde Navarra. Otra ruta es el Camino Primitivo, que sale desde Oviedo. Puedes descargar también la app de Buen Camino, que te ayudará a escoger el tuyo.

Prepárate para caminar

Aunque se trata de una actividad que atrae tanto a locales como extranjeros, ten en cuenta que debes prepararte físicamente. Son alrededor de 20 a 30 kilómetros los que recorrerás por día entre terrenos no pavimentados. Todo esto, cargando tu mochila. Lo más importante es que lleves zapatos cómodos, como tenis para correr. Además, te recomendamos no usar calzado nuevo.

Puedes hacerlo en bicicleta

Una de las mejores decisiones que puedes tomar es hacer el Camino de Santiago en bicicleta. Está permitido siempre y cuando estés preparado. Para ello, asegúrate de que tu bici no tenga ningún problema mecánico (o de saber resolverlos en caso de que se presenten). También recuerda practicar unos cuantos recorridos antes de aventurarte.

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Lo que debes llevar

Como son varios días de camino, asegúrate de llevar una mochila en donde quepa tu ropa, algún documento de identificación oficial (puede ser tu pasaporte), un botiquín de emergencias con medicinas y material para curación, artículos de higiene personal (podrás bañarte e ir al baño en los distintos alojamientos que hay a lo largo del camino). También guarda bloqueador y sombrero para el sol, mucha agua y una lámpara. No te olvides de llevar espíritu viajero.

¿Cuánto cuesta?

Depende si vas como turista o como peregrino. Normalmente es más caro como turista, ya que gastas en más cosas además de la alimentación y el hospedaje. Pero si quieres vivir la experiencia como peregrino, es más barato. Puedes comer en restaurantes del camino o bien, cocinarte tú mismo: muchos albergues dejan que lo hagas ahí. Puedes gastar entre 15 y 20 euros en tu comida. Además, si consideras un hospedaje no tan caro (por ejemplo, albergues de peregrinos) encontrarás lugares donde piden una aportación voluntaria. Te recomendamos dejar hasta 10 euros por persona. También considera gastitos adicionales, como si quieres entrar a monumentos o ir a la lavandería.