Le pedimos a expertos viajeros que nos dijeran aquello que les hubiera gustado saber antes de poner un pie (o haber metido la pata) en la ciudad más cosmopolita del mundo. Esto fue lo que nos compartieron:

Foto por Anthony DELANOIX en Unsplash

Moverse en taxi es caro y poco eficiente
Claro que habrá excepciones dependiendo del día y la hora, pero generalmente las calles más céntricas de Nueva York suelen estar muy congestionadas. A lo anterior súmale las tarifas altas de los taxis, lo cual te dará como resultado una cuenta bastante elevada. Es mejor optar por otras formas de transporte público, como el metro.

¡Es inabarcable!
¿Así que elaboraste una lista concienzuda sobre los lugares que debes conocer sí o sí? Permítenos recordarte que, con tantos y tan diversos atractivos, es casi imposible “palomear” la lista de imprescindibles en una sola visita. Te sugerimos llevar una agenda más manejable y dejar tiempo de “colchón” para perderte y hallar lugares inesperados.

El clima suele ser muy extremo
Por hallarse al lado del mar y en colindancia con varios ríos, la temperatura de Nueva York es muy fluctuante a lo largo del año: en verano te vas a cocinar mientras que en invierno todo se congela; lo anterior también cuenta para los cambios ambientales a lo largo del día, pues las mañanas y noches son considerablemente más frescas. Más vale checar con anticipación el pronóstico meteorológico y cargar con varias capas de ropa.

No hay un solo NY…
¿Sabías que en la zona metropolitana de Nueva York se hablan más de 800 idiomas? Con semejante diversidad, es prácticamente imposible encajonar la ciudad en una sola identidad cultural, lo cual cobrará mayor realismo cuando explores sus comunidades étnicas

…Y no todo es Manhattan
¡Esta es una ciudad de muchas islas y condados! Si bien Manhattan concentra algunos de los atractivos turísticos más notables, no es lo único que hay ni representa la totalidad de Nueva York. Los cinco principales buroughs o distritos en los que se divide la urbe son Brooklyn, The Bronx, Queens, Staten Island y la ya mencionada Manhattan, cada uno dividido a su vez en vecindarios con sabor y atmósfera únicas. Ahora entenderás por qué en tantas series y películas se pone énfasis en la isla o barrio donde viven sus personajes.

Los neoyorquinos sí viven de prisa 
Tal vez pienses que ese personaje estrambótico que viste caminando por la banqueta amerita una foto, sin embargo detenerse a media calle y sin previo aviso es considerado de muy mal gusto. Sí, los locales (al igual que los habitantes de otras grandes urbes del planeta) viven apresurados y detestan tener que lidiar con los turistas desconsiderados que no “ponen las intermitentes”.

Hay dos aeropuertos y están alejados
No olvides revisar con antelación cuál será tu aeropuerto de arribo y salida (LaGuardia o JFK) pues se ubican en zonas distantes siempre antecedidas por tráfico. Más vale salir con tiempo y seguro de cuál es tu terminal de destino.

Olvídate de un Airbnb entero para ti solo
Las leyes locales prohíben la renta de viviendas por menos de 30 días y sin la presencia de sus habitantes, con lo cual tus opciones se reducen a propiedades compartidas donde solo se rentan cuartos.

No lo dejes todo para el fin de semana
Con tantos habitantes y turistas, los principales atractivos suelen atestarse de viernes a domingo, así que te recomendamos distribuir tu visita a lo largo del resto de la semana.

Es una ciudad segura
A pesar de su parecido, Nueva York no es Ciudad Gótica, y aunque evidentemente hay sitios y horas poco convenientes para transitar, puedes conocerla tranquilamente y sin mayores riesgos.

¿Anotaste todo? Esperamos que estas recomendaciones te sean muy útiles al momento de planear tu viaje a la Ciudad que Nunca Duerme.